Viaje Perenne
Soy, fui y seré un delirio pasajero la resaca que desaparece deprisa un manto remendado, hecho jirones, pies descalzos sobre arena ardiente un sahumerio de eucalipto. Soy una criatura andrógina, vigilante de siete lagunas, la que ofrenda al viento su tarka Y se pierde a la vista hacia el albor Otrora embriagamos los cuerpos con un licor silvestre Entre sueños cruzábamos un sembradío y nuestras siluetas danzaron en lo alto de la meseta. Acostada al pie de un portal de piedra, Te espero ¿Estás ahí? Te respondo recitando una fantasía en coro junto a otros seres tallados con manos de algún siglo pasado